Es el félido más grande de América y el tercero en el mundo
después del tigre y el león. Entre el 2% y 5% de su población presenta
una alteración genética denominada melanismo (exceso de pigmentación) lo
cual hace que su pelaje sea oscuro, pero estos individuos no forman una
especie distinta a la del jaguar, ni siquiera una subespecie. En este
año una cámara colocada por el Ministerio de Ambiente en el Parque
Nacional Llanganates captó en video uno de estos ejemplares.